Intensa convivencia de 200 jóvenes MAG+S en Villafranca de los Barros previa a la JMJ de Lisboa
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Termina #JMJeducsi2023 dando gracias por todo lo vivido
7 agosto, 2023
Después del arranque en Villafranca y nuestro desembarco en Lisboa, hemos vivido días profundos y de mucho recorrido en los inicios de esta Jornada Mundial de la Juventud 2023.
Nuestro primer día en Portugal estuvo centrado en disfrutar de la magnífica acogida que se nos había preparado en la parroquia de Parede y en celebrar junto con los más de 30.000 peregrinos del grupo de la Conferencia Episcopal Española la eucaristía de acogida, en Estoril, presidida por el cardenal Omella, presidente de la CEE. Fue una ocasión ideal, en la fiesta de San Ignacio de Loyola, para darnos cuenta de la magnitud del evento y de las ganas de celebrar nuestra fe que luego hemos ido experimentando en nuestro recorrido.
Al día siguiente, tuvimos la gran oportunidad de visitar el Santuario de Fátima, para poner en manos de Nuestra Señora el deseo de conocer mejor a Jesús y vivirnos como «hombres y mujeres en la Iglesia». La casualidad hizo que estuviéramos en el lugar justo cuando pidieron voluntarios para cargar con la imagen de la Virgen de Fátima durante la Eucaristía internacional, presidida por el cardenal Tagle, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización. En su homilía nos recordó la necesidad de la conversión tras el encuentro cara a cara con Dios que es el objetivo fundamental que nos ha traído hasta Lisboa.
El miércoles fue el día del encuentro de la familia ignaciana española, compartiendo la eucaristía en Lisboa, en la Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación con más de 1.500 peregrinos de MAG+S y otras comunidades y movimientos vinculados a la Compañía de Jesús y a muchas congregaciones femeninas ignacianas, Esclavas del Sagrado Corazón, Hijas de Jesús… en España. En la fiesta de San Pedro Fabro pudimos celebrar y recordar el carisma ignaciano que compartimos y que a tantas personas nos ha movido en nuestra vida.
Estas experiencias nos sitúan para vivir las jornadas centrales de la JMJ con el Vía Crucis presidido por el Papa, la Vigilia y la Eucaristía final. Ojalá que podamos seguir experimentando nuestro ser en la Iglesia cerca del Santo Padre y de los millares de peregrinos que vamos a vivir juntos estas celebraciones.
