El proyecto de la Escuela Deportiva Guadalupe, Premio Espiga al Deporte en Extremadura

La Escuela Deportiva Guadalupe consigue el Premio Espiga 2019 que la Caja Rural de Extremadura, con el apoyo de la Dirección General de Deportes y de las Federaciones Deportivas, reconoce en su XV edición al impulso de la Actividad Física y el Deporte en la comunidad extremeña, para favorecer la práctica deportiva de una forma creativa y promotora de valores humanos.

El proyecto de esta Escuela nace de un sueño que contagia por la pasión con la que se vive, con un deseo muy profundo: promover valores humanos para influir activamente en la formación de la persona, en las relaciones que entabla y, por tanto, en su crecimiento integral. La práctica deportiva se aborda como una experiencia integral que aúna no sólo la tradicional inteligencia corporal, sino que hace ayuda a florecer la dimensión social, emocional, intrapersonal o espiritual. Ofrece 10 disciplinas deportivas diferenciadas (fútbol, baloncesto, patinaje, aikido, tenis de mesa, baile moderno, escalada…) para que todos los que deseen puedan conocer y practicar el deporte que se ajuste más a sus preferencias personales y condiciones físicas.

Cuenta con unos 300 participantes y unos 80 entrenadores, colaboradores y directivos, la mayoría antiguos alumnos de la Escuela jesuita pacense, que se identifican con un modo de entender el deporte como medio de cohesión social al servicio de la formación integral. El deporte también es aprovechado como herramienta de difusión para reclamar solidaridad y justicia con los más necesitados. De hecho, la carrera San Romilla (prueba atlética por la barriada de San Roque), destina lo recaudado cada año a un proyecto solidario diferente a través de la ONG Entreculturas. El 3×3 de Basket solidario permite igualmente dar voz a los que no la tienen. En las tradicionales convivencias y gymkanas a lo largo del año se aprovecha para que todo el excedente de ropa deportiva o alimentos ayude a paliar en cierta medida la necesidad de estos bienes, a través de la donación al comedor social de Martín Cansado en Badajoz o Cáritas diocesana.

El lema Juntos es mejor recuerda que somos gracias a los demás y los demás son gracias a nosotros. Intentamos situarnos allí donde más valor podemos aportar al conjunto y superar el sentido de la individualidad desde la colaboración y el trabajo en equipo, para no dejar a nadie fuera de juego. Y agradecemos profundamente que una entidad financiera como Caja Rural de Extremadura haya reconocido nuestro proyecto porque nos impulsa a seguir en este camino que nos sentimos llamados a recorrer.