Safa-Pedro Abad continúa dando oportunidades en verano
16 julio, 2020El colegio La Merced de Burgos celebra el centenario de Delibes
21 julio, 2020La mejor docente de Educación Primaria de España es jienense, nacida en Villanueva del Arzobispo y alumna del Centro Universitario SAFA de Úbeda, donde se diplomó como maestra en la especialidad de Educación Física. Es también licenciada en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad de Granada y autora de libros sobre actividad física, programación didáctica y trabajo por proyectos, así como cuentos infantiles y poemarios.
Actualmente ejerce su labor profesional en un colegio de Chiclana de Segura (Jaén) y ha trabajado en distintos centros andaluces, en los que ha desarrollado metodologías innovadoras que toman el juego como herramienta fundamental.
Entre otros galardones ha obtenido el premio Jaén Jóven por su labor en el ámbito educativo y el reconocimiento como mejor docente del año en España (premios EDUCA ABANCA 2019).
Charlamos con ella sobre vocación, formación y desarrollo profesional.
– La motivación es la palanca que pone en marcha nuestro desarrollo y activa nuestras expectativas, ¿de dónde proviene tu amor por la enseñanza?
Cómo debería ser normal en cualquier maestro, tengo una vocación absoluta por la enseñanza; me encantan los niños y las niñas y por otra parte me apasiona el deporte. Desde pequeña tuve muy claro que quería ser maestra de Educación Física y conforme fui evolucionando en mi carrera universitaria y posteriormente en las prácticas y proyección laboral como maestra, me he dado cuenta que realmente estoy ejerciendo la profesión de mis sueños.
– Tu juventud está ligada al deporte. En esa época conseguiste experiencia como monitora de ocio y tiempo libre, ¿en qué medida crees que esta actividad ha sido un referente en tu desarrollo profesional?
Para mí el deporte, la actividad física y la especialidad concreta de Educación Física han sido lo que me abrió en su momento los ojos para poder entender que en el aula tiene que caber el juego en todo lo que hacemos. Esto fue así porque el primer año que trabajé ejercí una tutoría y fue entonces cuando empiezo a descubrir que cuando
voy a las clases en las que imparto Educación Física, curiosamente, los niños y niñas me reciben con un entusiasmo extra al de cuando voy a impartir el resto de áreas. Y ¿por qué es esto?. Porque precisamente es un área en la que se aprende jugando, en la que el niño y la niña comparten con sus iguales, trabajan en equipo, experimentan pensando que solo están jugando, cuando en realidad están desarrollando y adquiriendo un montón de contenidos y aprendizajes.
La Educación Física me ha hecho entender que la mayor herramienta pedagógica es el juego.
– Estudiaste la diplomatura de Magisterio en Educación Física en el Centro universitario SAFA. ¿Qué recuerdos tienes de esa época?
Hasta que no llegué a la carrera era buena estudiante pero no estaba motivada con los estudios. Sin embargo cuando aterrizo en la carrera de Magisterio descubro que realmente es mi pasión; me encanta todo lo que estudio en ella, cualquier asignatura me parece enriquecedora y para mí son tres años maravillosos que recuerdo con un cariño muy especial porque además aprendí muchísimo.
– Te licenciaste en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, consigues el título de entrenadora nacional de ciclismo… ¿Qué formación crees que debe tener un maestro?
Hay que tener una formación específica para áreas concretas como los idiomas, la educación Física o la Música, y luego una formación genérica para el resto de áreas. Para mí, además, sería muy importante que dentro de esa formación (que debería ser a nivel nacional sin que cambiase el tipo de contenidos que se imparten en cada Comunidad autónoma), deberían introducirse aspectos mucho más metodológicos, es decir, que para formar a una maestro se incluyesen también una amplia gama de metodologías, independientemente de si luego se van a llevar a la práctica o no, pero el docente ha de saber que existe el Flipped Classroom, la gamificación, el Aprendizaje-servicio, un montón de metodologías y luego, cada docente decidirá cómo aplicar dentro de su propia realidad educativa cada tipo de metodología.
El maestro debe conocer una amplia gama de metodologías y decidir cómo aplicarlas dentro de su propia realidad educativa.
– En Educación Primaria, ¿cuál es el principal papel del maestro?
El tutor es una figura modelo en el centro para el niño o la niña, igual que en casa sus referentes son sus padres.El tutor le va a acompañar y guiar a lo largo de todo un curso
académico reuniéndose con su familia, intentado abordar los problemas que puedan surgir o las dificultades que tengan en otras áreas. El tutor tiene que empatizar muchísimo con su alumnado para intentar ponerse en su lugar, intentar descubrir sus talentos, sus capacidades y poder potenciar todo lo que se le da bien, hacer brillar esas estrellas que tiene en clase … Son además los que más tiempo pasan con los niños y niñas y deben formar personas para el mañana basándose en todo aquello que se les da bien, en todas las inteligencias múltiples.
– En tu práctica educativa realizas una clara apuesta por metodologías innovadoras y la incorporación del juego al aula. ¿En qué se concreta?
Innovar es introducir en el aula todo lo que es nuevo. Pero nuevo ¿para quién?. Lógicamente para el niño y la niña. Por lo tanto la palabra innovación no ha de ir asociada necesariamente a tecnología. Soy una fiel defensora de la práctica presencial, de las cosas palpables, de las experiencias vivenciales y me encanta el Aprendizaje para la vida(ApV), y dentro de esto defiendo mucho el Aprendizaje-Servicio.
– Efectivamente, la escuela no es solo el aula, ¿Cómo relacionas el aprendizaje del alumno con su entorno más próximo?
La escuela se basa en cuatro pilares fundamentales y no se puede sostener si falta alguno de ellos: el primero, por supuesto, es el alumnado. Luego está el profesorado, las familias, y el cuarto pilar, que es el contexto: el pueblo o el barrio, si hablamos de una ciudad muy grande. Es fundamental que cada tarea o proyecto que propongamos en clase, tenga en cuenta estos cuatro pilares. La enseñanza, para vivirla juntos y para que socialmente tenga importancia ha de involucrar a esas cuatro patas del sistema educativo.
Es tan sencillo como ver que elementos tenemos a nuestro alrededor que nos pueden favorecer en nuestra práctica docente. En mi caso, la Sierra de Cazorla y como tengo la fortuna de trabajar en un pueblo muy pequeño, puedo contar con todos los vecinos que me tienden la mano y participan con animales, montando un huerto ecológico en el cole, a través de la radio de la clase, donde también participan las familias… Para englobar todo el proyecto hacemos una actividad final “La gala de los talentos” donde participa el alumnado como presentadores del evento, la AMPA, personas del contexto próximo, todo el pueblo colaborando en un proyecto conjunto.
Alumnado, profesorado, familias y contexto son los cuatro pilares del sistema educativo.