Primera semilla para la cultura del cuidado

Alumnos y alumnas de 4º de ESO del Colegio Cristo Rey han recibido unas clases muy especiales basadas en la experiencia de escucha y de expresión. Dos ingredientes claves para conseguir entender, conocer y cuidar de otros. Juegos, talleres y dinámicas grupales han sido liderados por un equipo profesional del movimiento educativo global Scholas Occurrentes. Su Programa Ciudadanía nació en 2013 de la mano del Papa Francisco tras la experiencia implantada en Argentina para generar espacios de encuentro donde arraigue la cultura del cuidado entre los escolares. Una manera de estar en el mundo muy codiciada por el Entorno Seguro de la Compañía de Jesús. De ahí que su apuesta por este sistema se haya introducido en cuatro colegios jesuitas de España: SAFA de Écija, Juan XXIII de Barcelona, Guadalupe de Badajoz y Cristo Rey de Valladolid.

85 estudiantes han vivido la experiencia, de lunes a viernes. Conducidos por un equipo de 26 monitores -cuatro pertenecientes a Scholas y los demás voluntarios de la escuela de Educación de una universidad italiana y de Fray Luis de León de Valladolid- han participado en talleres de escritura, de escultura, en juegos y dinámicas grupales en horario lectivo. Juego y arte, dos herramientas de expresión y de escucha. “Con el juego salen muchas cosas: son ellos mismos, muestran sus pasiones y consiguen romper estereotipos”, explican Francisco Vila y Camila Deimundo. Y es desde ahí desde donde se sienten escuchados, libres para expresar y atentos a las novedades. Las actividades provocan esa comunicación enfocada al cuidado.

Después del juego, se dividen en grupos para trabajar el arte y el pensamiento en todo lo que tiene relación con el cuidado. Les invitan a escribir. A escribir, por ejemplo, su epitafio, o una carta nunca escrita, o aquella pregunta que siempre esperan y que nunca llega. Pensamientos que quedan dentro y que afloran con la palabra y con la expresión artística. De esta manera, ninguno de ellos se siente impotente en la expresión. “Vemos que el que no escribe, encuentra en la escultura su medio de expresión”, explican. Distintos caminos para lograr el mismo objetivo, el encuentro.

Scholas Occurrentes termina en Cristo Rey con una experiencia de cuidado más concreta: los estudiantes de 4º ESO comparten este espacio con los pequeños de 3º y 4º de Educación Primaria. De grandes a pequeños el cuidado es más real. Vivido todo, la semana termina con la respuesta a una sola pregunta: ¿Qué te pasó? ¿Quétepa? Tantas versiones a una respuesta como niños y niñas han vivido la experiencia del encuentro. Primera semilla, primera transformación.